ESTRATEGIAS Y TÉCNICAS DE MOTRICIDAD FINA , GRAFOMOTRICIDAD Y PREESCRITURA

La motricidad fina es la capacidad de realizar movimientos pequeños y precisos que requieren la coordinación de músculos, huesos y nervios, especialmente en las manos y dedos. Esta habilidad es crucial para tareas cotidianas como sostener un lápiz, abrocharse la ropa, escribir, dibujar y manipular objetos pequeños. El desarrollo de la motricidad fina comienza desde la infancia y progresa con la edad, siendo fundamental para el aprendizaje y la autonomía. 

 

Qué implica
    • Coordinación óculo-manual: La coordinación entre la visión y los movimientos de las manos para interactuar con el entorno.
    • Control muscular: La fuerza muscular y el control necesario para ejecutar movimientos precisos.
  • Planificación: La capacidad de planificar y ejecutar una serie de movimientos para completar una tarea. 
Ejemplos de actividades
  • Dibujar, colorear y escribir con un lápiz
  • Usar tijeras para recortar formas
  • Abrocharse botones o cerrar cremalleras
  • Armar rompecabezas
  • Atarse los cordones de los zapatos
  • Sostener y usar cubiertos
  • Manipular objetos pequeños como cuentas o semillas 
Si hay problemas con la motricidad fina
  • Las dificultades pueden estar relacionadas con problemas neurológicos, musculares o esqueléticos.
  • Las preocupaciones sobre el desarrollo de la motricidad fina en un niño pueden discutirse con un médico o solicitar una evaluación en la escuela.
  • Existen trastornos que pueden afectar la motricidad fina, como el Trastorno del Espectro Autista (TEA), el TDAH o la Parálisis Cerebra